A través dos retratos coñecemos o noso pasado. As fotografías sempre foron para gardar un momento no recordo, e aquí recóllense esas fotografías un pouco máis persoais dos nosos/as devanceiros/as.
Sada, 1937
En esta foto hecha en la huerta de la casa que tenía Virginia, podemos ver a su hijo Ovidio como cuida de su hermana Nilda, que está sentada en su sillita de paseo.
Al poco tiempo moría Ovidio a causa de la difteria cuando solo contaba con tres años de edad.