A través dos retratos coñecemos o noso pasado. As fotografías sempre foron para gardar un momento no recordo, e aquí recóllense esas fotografías un pouco máis persoais dos nosos/as devanceiros/as.
Sada, 1919
Los fotógrafos de la época, debían disponer de un amplio surtido de sillones y sillas, donde colocaban a los bebés para hacerles sus fotos. Aquí Toñita está sentada en un bonito sillón de madera del estilo de aquellos tiempos. Destaca el enorme lazo de su cabeza, que por cierto a todas las niñas le colocaban para hacerles la foto. Esta fue hecha sin duda para enviar a su padre, emigrado en los Estados Unidos y de esta forma ellos seguían como sus hijos iban creciendo al otro lado del Atlántico.
envíanos información da foto