O patrimonio é o legado que recibimos do pasado e que debemos coidar no presente para poder trasmitirllo ás futuras xeracións. Nesta sección ten cabida todo o relacionado co patrimonio de Sada. Etnografía, arquitectura popular e relixiosa, documentación histórica e todo o que nos poida axudar a coñecer un pouco mellor a nosa historia.
Para el montaje de la fábrica de lienzos y manteles reales, Adrian Roó y Baltasar Kiel se comprometían a traer de los Países Bajos diez familias, o más si fuera necesario.
Estas familias, de artífices experimentados en este tipo de industria, no podían ser detenidos ni embargados por cuentas, débitos u otras causas durante el plaza de dos años.
El facsímil que aparece en la foto corresponde a la minuta de un despacho de Carlos II al Consejo de Flandes, en 1688, concediendo salvoconducto a Roó y Kiel para traer a Galicia las familias fabricantes de lienzos de los Países Bajos.
Estas familias se distribuirían así:
Siete fabricantes de lienzos llamados “holandas”, de diferentes calidades.
Dos que entendieran de los blanqueos de dichos lienzos, aderezarlos, espadañarlos y componerlos.
Una que entienda de la fabricación de manteles reales.
Y un Capellán que entienda la lengua flamenca para suministrar a dichas familias los oficios divinos.
Dichas familias vendrían con todos los gastos pagados y se habrían de fabricar para ellas diez casas, por no haberlas a propósito, ni para su compra o en arriendo, en la filegresía de Santa María de Sada.
Encargándose asimismo de comprar los terrenos de pradería para los blanqueos, tender y regar los lienzos, abrirles las camas para que tengan las aguas necesarias y hacer las exclusas.
Además de estas familias los señores Roó y Kiel deberían traer:
Cuatro telares y lo necesario para ellos, para las siete familias fabricantes de lienzos.
Necesitando, así mismo, para principiar esta fábrica unas cien ruedas con sus cuerdas necesarias; dos prensas para cada familia; siete calderas grandes para cocer el hilado, como se estila en Flandes, y otras tantas tinajas correspondientes a dichas calderas, para hacer la colada de los linos.
Partidas de algodón y azul y unas cien barricas de ceniza de Alemania, que es con lo que se hacen las coladas en Flandes y otras partes del Norte.